Mié, 19-Noviembre-2025
  • Seguridad

El sobrino quería quedarse con los terrenos del anciano que vive en el municipio de Callapa-La Paz. 

 

Edwin Alfredo C. G., es el joven que quería matar a su Martín Condori de 77 años a punta de picotazos. El objetivo del criminal era quedarse con los terrenos del familiar quien tienen el cráneo fracturado, pero milagrosamente sobrevivió a semejante ataque desalmado.

El hecho se registró al medio día del 25 de octubre del 2025, mientras la víctima se preparaba para sembrar papa en su terreno ubicado en la localidad denominada Veta Verde, en el sector Turupi, en el municipio de Callapa del departamento de La Paz.

“Solo vi que el Edwin le pegó y se escapó junto a sus familiares en los dos autos en los que aparecieron con el David, hermano del agresor”, señala parte del testimonio de Susana, hermana de la víctima y tía del agresor.

Similar testimonio dio Rosa Cacasca, pareja de la víctima. Las dos mujeres relataron que ese día estaban en su parcela, preparando la tierra para la siembra de papa, de pronto se le acercó el agresor quien estaba junto a otro grupo de familiares que luego escaparon juntos.

En la Fiscalía de Viacha, donde se abrió el caso, las dos mujeres declararon que las agresiones son parte de un conflicto por los terrenos, por lo cual anteriormente ya se había denunciado a Edwin y a su madre, Rosa, quienes además tenían una orden de alejamiento.

Por su lado, otro testigo del hecho, fue el hijo de don Martín, quien llegó al lugar, el instante en que la familia del agresor escapaba del lugar en los dos autos. Llegó al sitio porque su padre lo llamó minutos antes, precisamente por el temor de ser agredido nuevamente.

Según los tres testigos, el agresor, sin mediar palabra, llegó hasta la parcela de don Martín y comenzó la persecución, el adulto mayor, su hermana y su pareja, trataron de llegar a su casa a metros del lugar, pero Edwin alcanzó a su víctima y comenzó a agredirlo con piedras y una picota, para luego huir del lugar.

Las dos mujeres, que se habían quedado atrás, solo atinaron a dar gritos y vieron a don Martín ensangrentado y con la fractura expuesta en la cabeza.

La Fiscalía de Viacha inició la investigación, pero demoró cinco días en aprehender al primer implicado, se trata de David, hermano del agresor, y una de las personas que huyó del lugar el día de la agresión, sin prestar ayuda a la víctima o detener al agresor. 

Un juez determinó la detención preventiva de éste último por cinco meses, mientras se investiga el paradero de su hermano, autor material del intento de paricidio.

Por su lado, el día de la agresión, Don Martín fue auxiliado en una carretilla. En las fotos tomadas del momento, se lo ve con la cabeza vendada para frenar la hemorragia por la fractura expuesta en el cráneo. El informe forense ratifica lo descrito por los testigos.

Sus hijos relataron que, primero fue llevado a un hospital cercano, pero luego los derivaron a un centro hospitalario en la ciudad de La Paz, donde lograron estabilizarlo. Sin embargo, hasta la fecha don Martin no recobra la conciencia plena, pues no reconoce a ninguno de sus hijos o familiares.