- Seguridad
El presunto autor del hecho utilizó un objeto contundente para partirle la cabeza de su patrón.
Un joven 22 años mata a su jefe para después robarle una camioneta, el criminal utilizó una madera para partir la cabeza de su patrón, el hecho sucedió en un negocio particular instalado en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.
El crimen sucedió en un negocio del barrio Florida donde el patrón de 59 años fue masacrado hasta aparecer con la cabeza destrozada. No hubo un arma sofisticada, solo un trozo de madera y la violencia que un trabajador empleó en quien el dueño del negocio había depositado toda su confianza.
Los agentes de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) confirmaron que el asesino no era un extraño, sino alguien que compartía el espacio diario con la víctima. El criminal convivía con su benefactor quien fríamente decidió quitarle la vida en menos de que cante el gallo.
Según los familiares de la víctima, hubo una discusión que llegó a los golpes momento antes de la muerte, algo pasó entre ellos dos que motivó al empleado a matarlo sin compasión. Sospechan que la codicia del joven lo motivó a cometer el crimen, esa codicia era por tener en sus manos propias una camioneta.
Ese acto de insaciable codicia y absoluta falta de humanidad pinta el perfil de un hombre peligroso. Su desprecio por la vida fue tal que profanó el lugar de su crimen una vez más, demostrando que, para él, todo era un simple objeto desechable, incluyendo la persona que le tendió la mano.
Aunque el comandante departamental de la Policía, General Rolando Raúl Rojas Daza, sugirió la remota posibilidad de un “móvil sentimental con una tercera persona involucrada”, la evidencia apunta a una crueldad más visceral, mezquina inspirada en una posible traición.
El único sentimiento detectable es el de una ambición patológica que no dudó en exterminar a quien le brindaba trabajo y sustento. Además, los nuevos datos detallaron que el criminal, volvió a la escena del crimen para intentar llevarse otro motorizado, pero decidió dejarlo en el garaje y darse a la fuga.
Los vecinos y familiares denunciaron que el hombre le había tendido la mano cuando este joven más lo necesitaba, incluso dormía en el lugar cuando se quedaba hasta muy tarde trabajando con su jefe.
Su regreso al garaje, donde finalmente abandonó el segundo vehículo robado, revela a un individuo impulsivo y peligrosamente impredecible, que aun deambula libre por la capital cruceña.
Mientras tanto, las autoridades de la FELCC desplegaron un operativo de inteligencia para su captura, la indignación y preocupación crece. El abogado de la familia solicitó a los agentes del orden que activen todos sus mecanismos para evitar que el sospechoso logre escapar del departamento cruceño.
“Pedimos que lo capturen y lo manden a Chonchocoro por asesino, mi papá le dio trabajo y este desgracio le pagó de la peor forma”, afirmó uno de los hijos de la víctima a medios locales.